Si bien existen muchos tratamientos BCC diferentes, cada uno se recomienda para ciertos pacientes. Las opciones de tratamiento no quirúrgico pueden ser preferibles en adultos mayores, aquellos con una expectativa de vida corta o pacientes que no pueden someterse a una cirugía. La decisión de tratar un CBC debe ser compartida entre el paciente y su proveedor, teniendo en cuenta las características del tumor y los valores del paciente. El siguiente es un resumen de los tratamientos BCC más comunes.
En la mayoría de los casos, el tratamiento más común de BCC implica la escisión quirúrgica con un control histológico del margen. Las terapias tópicas se reservan para los BCC que son pequeños y superficiales. También se recomiendan tratamientos con criocirugía y láser si la cirugía no es una opción. Un margen quirúrgico de tres a cinco milímetros es el estándar para ambos enfoques. Pero algunos pacientes pueden necesitar procedimientos adicionales si su BCC se ha propagado o ha reaparecido.
La escisión quirúrgica es el método preferido para tratar un BCC. Si bien algunas formas de BCC son susceptibles de radioterapia y criocirugía, estos procedimientos pueden ser costosos y pueden cubrir a los contribuyentes. Como resultado, los pacientes con estos tipos de cáncer deben considerar sus factores de riesgo específicos y decidir qué opción de tratamiento será mejor para ellos. Afortunadamente, hay varias opciones disponibles para el tratamiento de BCC.
La escisión quirúrgica es el tratamiento más efectivo para el BCC. Puede eliminar la mayoría de los BCC si se encuentra en la superficie. Sin embargo, puede ser contraproducente en pacientes con condiciones comórbidas. Además, el tratamiento es más complicado que la cirugía, que puede dejar tejido cicatricial. Sin embargo, ofrece muchos beneficios y se considera el tratamiento preferido por la mayoría de los pacientes. Este enfoque no invasivo a menudo se prefiere a las cirugías invasivas, incluidas las queloides y las lesiones multifocales.
Hay una variedad de tratamientos BCC disponibles. Según la ubicación, el tamaño y el tipo de BCC, un dermatólogo puede recomendar una o más opciones. El tratamiento suele ser indoloro e implica una aplicación de hielo frío en la zona afectada. El procedimiento es relativamente rápido, pero los pacientes deben saber que el área tratada puede sentir dolor después. Una vez iniciado el tratamiento, el paciente debe estar bajo estricta supervisión médica durante varias semanas.
Un médico puede sugerir un tratamiento para un BCC usando radiación o quimioterapia. Ambas opciones son efectivas, pero los riesgos y beneficios de cada una difieren. Además de la cirugía, los tratamientos médicos pueden incluir terapias tópicas o medicamentos sistémicos. La tasa de recurrencia de cada tipo de tratamiento dependerá de la ubicación del cáncer. Algunos tratamientos pueden no ser adecuados para algunos pacientes. Algunos de estos tratamientos solo serán efectivos para un número limitado de BCC.
La criocirugía es un tratamiento popular para los BCC de bajo riesgo. El procedimiento implica la aplicación controlada de nitrógeno líquido en el área afectada. El médico puede usar una sonda de temperatura para insertar la punta de la aguja debajo del tumor. Una vez congelada la zona, se aplica nitrógeno líquido hasta llegar a -60 grados C. Este tratamiento es un procedimiento rápido, pero la zona estará sensible durante la descongelación.
Otra forma de tratamiento es la cirugía láser. Se puede realizar en pacientes con CCB de bajo riesgo. El láser PCO 2 es la forma más común de tratamiento con láser basado en luz. La radiación utilizada se utiliza en BCC pequeños. El láser PCO 2 es un tratamiento eficaz para ambos tipos. Durante este procedimiento, el médico usará una fuente de luz especializada para quemar el área afectada. Algunos pacientes pueden encontrar esto doloroso, pero por lo general es inofensivo.
Las guías alemanas y de la AAD recomiendan la extirpación quirúrgica de los BCC. El láser y la criocirugía son alternativas para pacientes con CCB superficiales. Estos procedimientos no distinguen las células cancerosas de las normales. Por tanto, los márgenes de la cirugía serán estrechos, lo cual es necesario para evitar el riesgo de infección y minimizar los riesgos de la cirugía. También hay muchos tratamientos alternativos, como cremas y láseres, pero no son tan comunes.
Aunque la cirugía es la forma más común de tratamiento de BCC, no siempre es la más efectiva. Si bien la escisión convencional es suficiente para la mayoría de los BCC primarios, se prefiere la cirugía micrográfica de Mohs para aquellos con BCC de alto riesgo en la cara. A pesar de la alta tasa de recurrencia, la cirugía micrográfica de mohs no es tan efectiva en el tratamiento del melanoma. Además del tratamiento quirúrgico, la radioterapia es una opción. Sin embargo, el método de ECT puede no ser tan eficiente como el procedimiento quirúrgico.